domingo, 30 de julio de 2017

El (proto)reloj de sol calendárico de Breais (Cardielos.Viana do Castelo).




 Conocí los petroglifos de Breais(Cardielos.Viana do Castelo) este invierno del año 2017  y ya en mi primera visita descubrí que había no uno sino dos  alineamiento equinociales; que relacionaban dos y tres circulos respectivamente. El primero  de ellos nos revelaba una  cara antropomorfa de la que los dos círculos eran sus ojos. Establecida le línea equinocial  era fácil estudiar sobre el terreno las líneas de solsticio .Había otros alineamientos desviados aproximadamente 30º  , que correspondían a ellas.



 
 Al poco tiempo encontré  en internet un artículo publicado hace ya tiempo, en el que Ana Bettancourt había incluido el calco de los grabados .Y donde  se coincidía con mi  visión antropomorfa; aunque sin relacionarla con los alineamientos y la astronomía.
 Yo había descubierto en Cardielos  un nuevo de reloj sol y en el  soslticio de verano  fuí  a hacer mediciones de  las dos líneas de solsticio; una a la salida del  sol y otra en la puesta de sol. En ambos casos  fotografié al sol casi en línea  con los alineamientos.
Una segunda cuestión que descubrí en Cardielos son las propiedades astronómicas del lugar, pues una de las líneas de solsticio indica la dirección del río Limia, que desde Viana a Ponte de Lima es muy ancho y  recto.

Mi estudio sobre Breais  lo publiqué mas tarde  en un artículo sobre calendarios de sol en el arte rupestre atlántico que publiqué en Academia:Edu.


Hace unos días me enteré de que un grupo de estudiantes de la Universidad de Braga, dirigido por Manuel Santos Estevez había excavado el sitio , y que la laxe era el doble de grande y  tenía mas grabados .Fuí allí en cuanto pude; hacía tiempo que buscaba el momento de  fotografiar los alineamientos equinociales, provocándolos con un bastón vertical al pasar el sol por el Oeste(  brújula estabilizada). .
En esta que fué mi quinta visita a Breais,mi interés principal estuvo en  las grandes lineas paralelas  naturales (diaclasas )que atraviesan longitudinalmente la gran laxe. Hay otras  parecidas  en Monte Tetón(II), y en ambos casos su dirección genérica y aproximada  señala al río, al río Miño o al Limia. Pero en  Breais, también tienen un valor astronómico pues señalan aproximadamente el orto del solsticio de verano.
El antropomorfo principal de Breais apoya su gran cabeza, en un  largo surco que une los dos circulos que existen a uno y otro lado, en los extremos de sus hombros . Y ese surco es casi  paralelo a las diaclasas naturales. El artista se ha basado en ellas para hacer su obra. Desde el principio contempla las orientaciones astronómicas.


 Manuel Santos y su equipo han hecho también mediciones topoastronomicas. Además, durante la excavación se ha hecho un buen trabajo de popularización y explicación del yacimiento. En nuestra visita última paseaban por allí dos mujeres  que se ofrecieron a conducirnos a otra roca a unos 300 metros en la que hay entre otros motivos un caballo. Enseguida nos indicaron a lo lejos un monte cónico, que yo conozco pues es inmediato a Ponte de Lima, que se llama de Sto. Ovidio, y  sobre él nos dijeron que en el orto de solsticio de verano allí nacía el sol. Otro monte cónico, al otro lado del río y cuyo nombre desconocían señalaba el orto del solsticio de invierno. Mi estudio sobre mapas no los determinaban pero dejaba abierta esta posibilidad..
 Mi duda ahora es sobre si las mediciones topoastronómicas realizadas durante la excavación han ido mas allá de este aspecto  relacionado con la geografía. No sé si se han medido las direcciones de los alineamientos entre circulos, si los calcos de Ana Bettencourt se presentarán en su día con  las orientaciones astronómicas que yo he estudiado. Si es así, la Universidad de Braga se ha anticipado a la de Santiago insensible a mis llamadas para emprender el estudio astronómico de los petroglifos gallegos. Invitado por Ana Bettencourt y Manuel Santos participé hace poco en una conferencia en Braga, donde presenté mi trabajo sobre calendario y relojes de sol, pero no hubo un coloquio después de mi exposición, ni indicio alguno de que mi  línea de trabajo iba a ser emprendida por sus investigadores.